Sé
que a veces quisieras rendirte, se que a veces piensas que no podrás,
que todo está perdido y que sobre todo las fuerzas se te han terminado.
Te
he visto llorar cuando te has sentido incapaz, he visto pensativo los
últimos días, he visto como has querido disimular que te sientes mal en
muchas ocasiones.
Sé
que a veces ríes mientras quieres llorar, se que tratas de cuidar tu
imagen porque no quieres que los demás dejen de verte como esa persona
fuerte que eres.
Sé
que tienes muchos conflictos internos, se que a veces piensas que no
cumpliré mi promesa, se que a veces piensas que me he alejado de ti y en
muchas ocasiones crees que por tus errores no mereces que te conteste.
Yo
conozco todo de ti, se quién eres, conozco tu corazón sincero, se que
muchas veces quisieras ser más fuerte, pero cedes, se que muchas veces
quisieras agradarme, pero fallas en el intento. Te he visto cuando
fallas, veo la angustia que hay en tu corazón por haber hecho lo
contrario, se lo arrepentido que estas y sobre todo sé que me amas con
todo tu corazón.
Yo
lo sé todo, porque morí por ti, porque vivo en ti, porque eres mío,
porque a donde vayas te acompaño, y en tus momentos de tristeza y
soledad, he estado sentado junto a ti.
Sé
que en muchas ocasiones te has olvidado de mí, has pasado en algunos
momentos de tu vida sin comunicarte conmigo, pero aun así, yo te sigo
amando porque mi amor por ti es eterno.
Yo
te espero cada mañana al despertar, te acompaño en tu diario andar, te
cuido, te protejo y cada noche estoy ansioso por escucharte hablarme y
aunque a veces el cansancio o el stress del día te ganan la partida,
estoy allí para cuidar tus sueños y darte el descanso que necesitas.
Yo
solo quiero pedirte que te levantes y luches, no te des por vencido, no
te rindas, que las presiones de la vida no te derroten, que las
circunstancias que estas pasando no te desanimen, si me tienes a mí de
tu lado, entonces ¡Vamos a vencer!, tu eres victorioso en mí, porque yo
te he dado la victoria, no le temas al mundo, porque Yo ya lo he
vencido.
Tranquilo,
tranquila, solo déjame abrazarte, déjame hacerte sentir que soy Yo
quien está a tu lado en este momento, quiero que sientas lo mucho que te
amo y lo mucho que estoy dispuesto a hacer en ti, si me lo permites.
Déjame
acariciar tu cabello, déjame recostar tu cabeza en mi hombro, déjame
cubrirte en un abrazo, besarte la frente, verte a los ojos y decirte:
“No te voy a dejar nunca”
Te amo y siempre estaré allí a tu lado.