A veces la maldad del ser humano llega a
un punto casi inimaginable. El hombre, ya sea por motivos de poder,
avaricia o simplemente porque estar perturbado, es capaz de las mayores
atrocidades que se puedan imaginar. Es el caso de este hombre que violó
de manera salvaje a una pequeña de tan solo un año.
Una auténtica abominación que debería
ser castigada con la peor de las venganzas, y eso es precisamente lo que
su padre hizo, porque no estaba dispuesto a consentir que el crimen
contra su pequeña quedaran impune. El padre decidió tomarse la justicia
por su mano, algo que aunque no sea del todo correcto, parece lógico.
Así que sin dudarlo encontró al violador
de su hija y decidió cortarle las menos y sus órganos s3xuales,
castrándolo así para siempre, seguramente pensando que ya no podría
volver a atacar a ninguna niña ni causar tanto mal como le ha causado a
él y a su hija.
La noticia ha causado una gran conmoción
en todo el mundo, y ha abierto un debate sobre lo bueno o malo de
tomarnos la justicia por nuestra mano, por nuestros propios medios.