Internet está lleno de hechos que dejan
sin palabra a todo el mundo. Aunque parezcan historias insólitas, muchas
tienen sus diferentes argumentos para darlas por ciertas. Así sucedió
en China, en donde un hombre “resucitó” después de cuatro meses de estar
enterrado. El hecho dejó a científicos y a pobladores de la zona
parapléjicos ante este insólito hecho.
En la pequeña provincia de Guagxi, una
familia se vio tocada por un inesperado y aterrador hecho. El padre de
familia de 65 años un día amaneció sin pulso. Su esposa notó que no
reaccionaba a sus llamados, por lo que decidió llamar a los doctores
hasta su casa para que le brindaran auxilio. Luego de una rápida
revisión, los especialistas determinaron que el hombre había muerto,
pues no respiraba, no tenía reflejos oculares y tampoco tenía pulso.
La aterrador anoticia embargó a la pobre
familia, quien se vio obligada a organizar un pequeño funeral para que
los familiares y amigos más allegados se despidieran del hombre y le
brindaran sus más sentidas condolencias a los familiares. Como la
familia era de recursos muy limitados, entonces procedieron a enterrar
el cuerpo del señor en el patio de su casa, como se acostumbra a hacer
en los casos donde las familias no pueden costear las cuotas de un
cementerio.
Cuatro meses después de haberlo
enterrado, sus hijos acudieron a la policía un día para denunciar que el
féretro de su padre había sido abierto, y no se encontraba en el
interior de la urna. Además, todo apuntaba a una profanación porque la
tierra había sido removida. La mayor sorpresa de los familiares y la
policía fue cuando al regresar al lugar encontraron al hombre acurrucado
en una de las esquinas de la casa.
No podían creerlo. El hombre estaba en
estado de shock y no emitía una sola palabra. Sólo pidió que lo
trasladaran a un hospital. Así fue. En el lugar lo encontraron bajo un
extremo estado de desnutrición y deshidratación. El hombre, una vez que
comenzó a recuperarse, sólo comentó que nos sabía cómo había llegado
allí y que lo último que recuerda fue golpear un pequeño lugar cerrado.
Además, admitió que sentía que había dormido mucho.
Por ahora, las autoridades locales y los
científicos se encuentran analizando el hecho que catalogaron de
“resurrección”. De igual forma, se encuentran estudiando las
posibilidades de que este hecho se haya repetido en otras partes del
mundo.
Esta es, sin duda, una de las miles historias asombrosas que suceden en nuestro planeta.